Hyphessobrycon jackrobertsi

Descripción

Forma:

Muy similar a otras especies medianas de Hyphessobrycon: cuerpo ligeramente romboidal, comprimido lateralmente. Ojos muy grandes en relación al tamaño de la cabeza; boca en posición terminal con la mandíbula inferior prominente. Destacan mucho su aleta dorsal, de gran tamaño y en forma de hoz (lo que le da el sobrenombre de “tetra hoz” en algunos países); y la aleta anal, de gran tamaño también formando un gran triángulo que finaliza en punta, en forna de quilla. La aleta caudal está bifurcada, con dos extremos finos que recuerdan la forma de un boomerang.

Habita áreas con gran cantidad de vegetación (plantas acuáticas y palustres, materia orgánica en descomposición, ramas, etc.).

Coloración:

Muy similar en forma y color a otros tetras rosados, presentan un cuerpo de color rosado uniforme y brillantes aletas de color negro intenso con bordes blancos. Se observa también una línea negra que atraviesa el ojo en sentido vertical. El color de las hembras es más neutro, menos intenso, tirando hacia el plateado con ciertos toques rosados tanto en el cuerpo como en las aletas.

Tamaño:

Su tamaño máximo ronda los 4cms.

Dimorfismo sexual:

El colorido de los machos es más intenso, y sus aletas están más desarrolladas, sobre todo la dorsal (en forma de hoz, que usan para pavonearse y exhibirse entre ellos), y la anal.

Parámetros del agua:

PH: 5.5-7.0
GH: 5-15
Temperatura: 24-28ºC

Al ser un pez de cardumen, se recomienda una compra mínima de 10-12 ejemplares y un tanque de no menos de 100 litros para albergarlos. Su mantenimiento en grupo es una condición imprescindible para garantizar su bienestar. Los ejemplares solitarios o en grupo insuficiente tienden a estresarse rápidamente y se vuelven particularmente susceptibles a distintas enfermedades.

Se le debe ofrecer un acuario muy plantado, puesto que aprecia un entorno particularmente rico en vegetación, que no sólo le ofrecerá numerosos escondites donde descansar; también será un entorno favorable para una eventual reproducción en el acuario. Las plantas flotantes pueden servir para recrear la atmósfera tenue característica de su hábitat. La presencia de madera o ramas dará también un aspecto más natural y contribuirá a la formación de escondites y zonas de descanso.

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