El acuario holandés
Los Acuarios Holandeses son un estilo antiguo de paisajismo acuático, que data de principios del siglo 20 en Holanda. El estilo se centra en ordenadas hileras de plantas que irradian desde un punto focal central, con plantas más bajas en el frente y las plantas más altas en la parte de atrás (la creación de profundidad). Usted verá a menudo descrito como “el escape” por medio de las plantas.
Los paisajes holandeses generalmente disponen de plantas acuáticas más coloridas. Se puede comparar a un jardín bien cuidado, donde todas las plantas están dispuestas con un propósito y que además se mantienen recortadas y definidas. Puede que no sea el paisaje más natural, pero es muy bonito e interesante a la vista. No suele presentar rocas o troncos. El color, el contraste y la belleza de las plantas es de suma importancia.
Los principios de la técnica del estilo holandés, se basan en la utilización de muchas plantas. En concreto provienen de no más de 10-12 especies, para crear correcto acuario. Los grupos madre se agrupan y forman matas bien tupidas arrancando de la fila de atrás hacia adelante. Una selección de plantas con diversos tamaños, colores, texturas, hojas y tasas de crecimiento son importantes a la hora de crear un acuario holandés. Estas plantas deben ser cuidadosamente organizadas de modo tal que haya un contraste en color, tamaño de la hoja, y textura entre cada tipo de planta. Dependiendo del tipo de plantas utilizadas, deberán ser ubicadas de modo tal que asegure diferentes alturas, para dar profundidad y crear puntos focales. Para crear una apariencia tupida, tendrá que podar frecuentemente y proporcionar una buena cantidad de nutrientes.
La cantidad de plantas provienen de no más de 10-12 especies, para lograr un arreglo bien definido. Es indispensable la correcta selección de las mismas, garantizando diversos tamaños, colores, texturas, hojas y tasas de crecimiento para lograr un estilo holandés.
Estas plantas deben ser cuidadosamente ubicadas de modo tal que haya contraste de color, tamaño de la hoja, y textura entre cada tipo de planta. Dependiendo de qué tipo de plantas se hayan utilizado, la ubicación también debe estar a diferentes alturas para dar profundidad y crear puntos focales dentro del acuario. Con esto, lograremos crear una apariencia exuberante, que luego habrá que podar frecuentemente y proporcionarle una buena cantidad de nutrientes.
Debido a la densidad y gran plantación de este estilo, es rara la aparición de algas en las etapas iniciales. Otra gran importancia de un acuario plantado con estilo holandés, es el uso correcto de los peces. Tener un cardumen de peces es lo que complementará la totalidad del acuario, creando una sensación de plenitud. La mayoría de las especies de tetra son una gran opción al momento de decidir cuales son los que vayamos a utilizar.
Los acuarios holandeses se encuentran en la cima de la afinidad del paisajismo acuático, ya que representan lo mejor de los dos grandes mundos de agua salada y de agua dulce. Los acuarios de agua salada son populares porque muestran una gran cantidad de especies acuáticas con colores brillantes y contrastantes. Los acuarios holandeses hacen también estas dos cosas. El ecosistema plantado hace un gran hincapié en plantas fértiles, sin dejar de reflejar la complejidad visual y contrastes de colores brillantes que se ven a menudo en los acuarios de agua salada.
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